Las lesiones en la cabeza causadas por un golpe violento también se conocen como lesiones cerebrales traumáticas o LCT. Este tipo de lesión es más común de lo que pensamos. En 2020, alrededor de 176 estadounidenses murieron todos los días por causas relacionadas con LCT.

Los niños pequeños y los adolescentes son algunos de los grupos más susceptibles a las lesiones en la cabeza. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) por sus siglas en inglés, el 6,8 % de los niños menores de 17 años habían tenido alguna vez síntomas de una lesión cerebral o una conmoción cerebral.

De los niños dentro de este rango de edad, solo el 3.9% alguna vez tuvo un diagnóstico de conmoción cerebral o lesión cerebral por parte de un proveedor de atención médica. En 2019, aproximadamente el 15 % de todos los estudiantes estadounidenses de secundaria informaron sobre conmociones cerebrales relacionadas con deportes o actividades recreativas.

La cantidad de niños que alguna vez han presentado síntomas de una lesión leve en la cabeza o una conmoción cerebral aumenta con la edad. Los niños de 12 a 17 años tenían más probabilidades de sufrir una lesión cerebral que los niños de 0 a 5 años.

Lesiones cerebrales en niños vs. Adultos

Los niños pequeños tienen más probabilidades de sufrir lesiones en la cabeza que los adultos debido a que tienen la cabeza pesada y los ligamentos débiles de la columna cervical. Por lo tanto, la lesión cerebral resultante da como resultado una lesión cerebral grave debido a sus cráneos maleables y suturas no fusionadas.

Debido a su sensibilidad causada por la edad, los niños menores de 4 años con una lesión cerebral pediátrica grave tienen menos probabilidades de recuperarse por completo. Considerando que, la rehabilitación neurológica de una lesión cerebral leve a menudo es mejor en niños que en adultos mayores.

Aunque hay muchos estudios que avalan el tratamiento y la recuperación en adultos, no se puede decir lo mismo de los niños. Las lesiones cerebrales en niños no son tratadas de la misma forma que las de un adulto. 

A diferencia de los adultos, es más probable que las lesiones traumáticas sufridas a una edad temprana afecten a los niños en su desarrollo. Los niños que sufren una lesión grave pueden perder algunas o todas las funciones de uno o más músculos. Así como la capacidad de hablar, ver, oír o saborear.

Como se mencionó anteriormente, el riesgo de lesión cerebral es mucho mayor en los adolescentes que en los niños pequeños. Las lesiones cerebrales traumáticas también son más frecuentes en los niños que en las niñas.

Aunque muchas lesiones cerebrales traumáticas son causadas por caídas accidentales o accidentes automovilísticos, entre los adolescentes, las lesiones cerebrales a menudo son lesiones deportivas sufridas debido a deportes de contacto o actividades al aire libre como andar en patineta o andar en bicicleta.

La Asociación Estadounidense de Cirujanos Neurológicos (AANS) por sus siglas en inglés informa que más del 21% de todas las lesiones cerebrales en niños y adolescentes fueron causadas por actividades recreativas. Las lesiones menores en la cabeza o las conmociones cerebrales son muy comunes entre los atletas, especialmente entre los jugadores de fútbol. Pero tenga en cuenta que lo que inicialmente puede manifestarse como una lesión leve en realidad puede ser muy problemático en el fondo.

Síntomas de una lesión Cerebral en niños

Aunque algunos síntomas en los adultos pueden ser similares a los de los niños, es posible que los niños pequeños y los bebés no puedan comunicar estos síntomas correctamente. Si sospecha que su hijo ha sufrido una lesión cerebral pediátrica, puede buscar lo siguiente:

• Fácilmente irritable
• Llanto constante o dificultad para ser consolado
• Dificultad o incapacidad para prestar atención
• Cambio en la rutina de alimentación o lactancia.
• Cambio en los patrones de sueño
• Cambios de humor o estados de ánimo más depresivos
• Fatiga
• convulsiones
• Pérdida de interés en los juguetes favoritos.

Algunos otros síntomas que pueden ser comunes en niños y en adultos son:

• Dolores de cabeza
• Sensibilidad a la luz y al ruido
• Náuseas y vómitos
• Pérdida de memoria
• Problemas con la concentración
• Problemas con la visión, incluyendo visión borrosa o visión doble
• Pérdida del conocimiento o dificultad para despertarse
• Pupila dilatada
• Problemas del habla
• Sangre o líquido claro que sale de la nariz o los oídos
• Moretones o golpes en el área hinchada

Que esperar

Si tu hijo presenta alguno de los síntomas mencionados anteriormente o pérdida de funciones cognitivas tras un golpe en la cabeza, debes llevarlo a un profesional de la salud lo antes posible. Es posible que el médico de su hijo deba realizar algunas pruebas de diagnóstico para obtener una imagen más completa de la gravedad de la lesión de su hijo

Dependiendo de dónde se haya producido la lesión traumática, los efectos a corto y largo plazo que experimentará su hijo pueden variar. Algunos de estos efectos pueden ser cambios en el comportamiento o en la personalidad. Los efectos a largo plazo de la lesión cerebral traumática en los niños pueden incluir trastornos del habla o del lenguaje, habilidades cognitivas y académicas reducidas, y más

El camino hacia la recuperación

Los síntomas, el estado de salud general y la edad de su hijo son factores que entran en juego con respecto al tratamiento de su hijo. Su tratamiento también puede depender de la gravedad de la lesión en la cabeza.

Según la gravedad de la lesión, el tratamiento de su hijo puede incluir:

• Colocar hielo en el área lesionada
• Descansar
• Ungüento antibiótico y vendaje.
• Puntadas en el cuero cabelludo para cerrar una herida abierta
• Observación constante
• atención médica inmediata
• Hospitalización
• Asistencia para respirar a través de una máquina como un ventilador mecánico o un respirador
• Derivación a un especialista en lesiones cerebrales traumáticas

Su hijo también debe ser monitoreado por aumento de la presión intracraneal, que se puede identificar a través de varias pruebas de diagnóstico por imágenes. Esto podría significar que se necesitará una operación o que su hijo deba permanecer en una unidad de cuidados intensivos.

Las lesiones cerebrales en niños también puede provocar fracturas de cráneo. Una fractura de cráneo es cuando ocurre una ruptura en el hueso craneal (cráneo). Hay cuatro tipos de fracturas de cráneo: lineal, deprimida, diastática y basilar.

Mejorar la recuperación de una lesión cerebral en niños

Después del alta, es crucial que un niño lesionado continúe su proceso de recuperación incluso en casa. Durante este tiempo, puede explorar otras formas de terapia o actividades que puedan ayudar a promover el proceso de neuroplasticidad, para ayudar a mejorar la tasa de recuperación de su hijo.

Durante años se creyó que el cerebro era un “órgano no renovable”. Pero gracias a los avances de la ciencia y la neurobiología, ahora sabemos que este no es el caso. El cerebro se reconecta constantemente a lo largo de nuestra vida, moldeándose a sí mismo a través de nuestras experiencias. Entonces, la respuesta a la pregunta “¿Puede el cerebro curarse a sí mismo del daño?” La respuesta es sí.

La neuroplasticidad es el proceso utilizado para fortalecer las conexiones neuronales a través de la repetición y la práctica. Como se mencionó anteriormente, el cerebro se moldea a sí mismo a través de las experiencias. Por lo tanto, las acciones continuamente repetidas fortalecerán la vía neural.

A través de este proceso, se recomienda encarecidamente la terapia como la fisioterapia, la terapia del habla y la terapia ocupacional para ayudar a optimizar la recuperación.

Obtenga la ayuda que su hijo necesita

En Brain Injury Help Center California, podemos ayudarle a usted y a su familia a obtener el apoyo y los recursos que su hijo necesita para recuperarse de su lesión. Si su hijo sufrió una lesión cerebral traumática, nuestro equipo puede ayudarlo a obtener la atención médica necesaria.

En el caso de que la lesión de su hijo haya sido causada por una parte negligente, también podemos ponerlo en contacto con un equipo de abogados de lesiones personales experimentados y compasivos que pueden ayudarlo a obtener la compensación que su hijo merece.

No dude en contactarnos en (866) 576-0936 para obtener la ayuda que su hijo necesita.