Garden Grove, California — Noelia Ayala, residente de 24 años en Garden Grove, ha sido sentenciada a 12 años a cadena perpetua por golpear severamente a su hijastro de 2 años, causando parálisis permanente y daño cerebral grave en el niño.
La sentencia sigue a la condena de Ayala en julio de 2024 por cargos que incluyen intento de tortura y asalto, que llevaron al estado de coma del niño.
El 23 de agosto de 2019, los servicios de emergencia fueron llamados a la casa de Ayala, donde encontraron al niño vomitando sangre y semiinconsciente. Fue trasladado de inmediato al Hospital Infantil del Condado de Orange (CHOC).
Los exámenes médicos revelaron contusiones extensas, marcas de mordeduras y sangrado cerebral severo, requiriendo cirugía de emergencia para aliviar la presión en su cerebro.
El ataque de Ayala surgió de su frustración por las ausencias de su pareja y disputas con la madre del niño. A pesar de atribuir inicialmente las lesiones a un accidente en la piscina, los profesionales médicos identificaron signos de abuso repetido.
El padre del niño, Alberto Aragon, enfrenta cargos por abuso infantil y negligencia debido a la demora en la atención médica.
El niño, ahora de 7 años, sufre efectos permanentes del brutal ataque. El fiscal del condado de Orange, Todd Spitzer, condenó el acto, destacando el impacto severo en la joven víctima y los incansables esfuerzos de los profesionales médicos en su recuperación.